El mediodía en la calle
El mediodía en la calle, atropellando ángeles,
violento, desgarbado;
gentes envenenadas lentamente por el trabajo, el aire, los motores;
árboles empeñados en recoger su sombra,
ríos domesticados, panteones y jardines
transmitiendo programas musicales.
¿Cuál hormiga soy yo de estas que piso?
¿qué palabras en vuelo me levantan?
«Lo mejor de la escuela es el recreo»,
dice Judit, y pienso:
¿cuándo la vida me dará un recreo?
¡Carajo! Estoy cansado. Necesito
morirme siquiera una semana.
Jaime Sabines.
2 comentarios:
buen selecto,
fue solo elección?
o padece esa fatiga?
besos
eze
En realidad padezco de ese mal.
Saludos Ezequiel.
*Dato de color: me gusta tu nombre, un día, si tengo un hijo se llamará así.;)
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